¿En qué se parece una mujer a un gato? Condenada por serlo, bajo incógnitas que me niego a contestar.
La falta de nombres, el olvido y la censura es una constante hasta el cansancio. Ellas nunca fueron musas, ni esposas.
Nosotras no nos perdimos nuestra historia. Fuimos las primeras en olvidar la tierra y romper vínculos sanguíneos.
El enemigo se estrelló ante la fuerza de la clandestinidad. Se crearon hilos de revoluciones a través del tiempo y la distancia. Me quité el sostén ante las cámaras de la guerra y me puse la máscara contra los ataques.
No sé para que publico, de todas formas no ves mis indirectas.