A veces pensamos que las cosas son fáciles, que las personas son las indicadas y que el tiempo sólo nos está haciendo una mala jugada. Pero… el tiempo sólo sigue transcurriendo. El tiempo no se detiene y el universo tampoco lo hace.
En cambio, nosotros sólo seguimos existiendo, o no… Tal vez sentimos que lo hacemos. Tal vez sólo vemos pasar los días en el calendario, sin poder salir de lo más profundo de nuestros pensamientos.
De una mente que parece no descansar ni un momento, pensamientos que nos consumen y que nos hacen sentir tanto y tan poco.
Una luz frágil entre un universo infinito que intimida a cualquiera, pero que no cualquiera logra acariciar.
No sé para que publico, de todas formas no ves mis indirectas.