Taeko Nomiya is a photographer of Mexican and Japanese binationality, who manages to convey unique sensations through double exposure. His effervescent and unparalleled art takes us through never-before-seen passages between parallel cultures.
Taeko Nomiya es una fotógrafa de binacionalidad mexicana y japonesa que logra transmitir sensaciones únicas a través de la doble exposición. Su arte efervescente e inigualable nos lleva por pasadizos nunca antes vistos entre culturas paralelas.
Gabriel: ¿Qué significa una fotografía para ti?
Taeko Nomiya: Para mí las fotografías son lo que para otras personas son las cartas. Yo de niña solía tomar y juntar fotos durante todo el año sabiendo que en las vacaciones iríamos a Tokio y con esas fotos les podía enseñar a mis familiares allá cómo era nuestra vida aquí. Y también pasaba al revés, tomaba fotos en Tokio sabiendo que cuando volvieran a empezar las clases iba a poder llevarlas a la escuela y enseñarle a mis amigos cómo era la vida en Japón.
G: What does a photography mean to you?
T: For me, photographs are what other people think of letters. As a child I used to take and collect photos all year round knowing that during the vacations we would go to Tokyo and with those photos I could show my relatives there what our life here was like. And it was also the other way around, I would take pictures in Tokyo knowing that when classes started again I would be able to take them to school and show my friends what life was like in Japan.
G: When did you realize you were a photographer?
T: Actually I always took pictures, but since I did it as a child and it was always part of my life, I never thought of it as something that I could devote myself entirely to. It was only in the last year and a half, after I participated in the exhibition Nippon America 日本アメリカ, that I began to be published claming I was a photographer. If what makes you a photographer is taking pictures, you could say I was a photographer since I was a child. But if what makes you a photographer is that you are publicly recognized as such, I discovered myself as a photographer very recently.
Gabriel: ¿Cuándo te diste cuenta que eras fotógrafa?
Taeko Nomiya: En realidad siempre tomé fotos, pero como lo hice desde chica y siempre fue parte de mi vida, nunca lo pensé como algo a lo que me podría ser dedicar enteramente. Fue apenas en el último año y medio, a raíz de que participé en la exposición Nippon América 日本アメリカ, que se empezaron a publicar cosas sobre mí diciendo que era fotógrafa.
Taeko Nomiya: Si lo que te hace ser fotógrafa es tomar fotografías, podríamos decir que fui fotógrafa desde niña. Pero si lo que te hace serlo es que te reconozcan públicamente como tal, me descubrí como fotógrafa hace muy poco.
Gabriel: ¿Qué consideras que es ser un fotógrafo o buen fotógrafo?
Taeko Nomiya: Mi papá me enseñó a hacer dobles exposiciones de niña, así que la primera no la guardo (ni la recuerdo, la verdad) y en todo caso no debe haber sido muy buena. Pero sí recuerdo que desde el principio me pareció que eso era en realidad la fotografía. Nunca lo concienticé antes de saber que se podían hacer dobles exposiciones, pero en cuanto lo supe, me pareció que las fotos normales estaban incompletas, que era necesario meter más cosas. Ahora es muy fácil ponerle texto o imágenes externas a una foto para complementar el mensaje, pero en aquel tiempo no era así, y tomar dos fotos en una sola fue una gran revelación para mí.
G: What was your first double exposure photo?
T: My dad taught me to do double exhibitions as a child, so I do not keep the first one (I do not remember it, really) and in any case it must not have been very good. But I do remember that from the beginning it seemed to me that this was actually photography. I never made it aware of it before I knew that double exposures could be made, but as soon as I knew it, it seemed to me that the normal photos were incomplete, that more things needed to be put in. It is now very easy to put external text or images to a photo to complement the message, but at the time it was not so, and taking two photos in one was a great revelation for me.
G: Do you think anything can be photography?
T: Yes, just like anything can be the subject of conversation. As I told you, for me the photo is not about capturing sublime images but about communicating a punctual thing, so for me there is no reason why something could be unworthy of going out in a photograph.
G: ¿Crees que cualquier cosa puede ser fotografía?
TN: Sí, igual que cualquier cosa puede ser objeto de conversación. Como te decía, para mí la foto no se trata de capturar imágenes excelsas sino de comunicar una cosa puntual, entonces para mí no hay una razón por la que alguna cosa podría ser indigna de salir en una fotografía.
G: ¿Cuál ha sido tu experiencia más impactante como fotógrafa?
TN: Creo que tendría que ser este momento que estoy viviendo ahora en el cual pasé de llevar una vida muy privada a tener una vida pública. Que se escriban cosas sobre mí y, sobre todo, que decenas de desconocidos me escriban para decirme cosas. Todos los días me llegan mensajes de gente que me cuenta las cosas que siente con mis fotos, gente japonesa-mexicana que se ve representada en ellas y que dicen que nunca habían sentido eso antes o gente que me enseña que puso una foto mía como fondo de pantalla o como portada de Facebook. Justo ayer me llegó una foto de una chica que bajó una foto mía de internet, la imprimió y la puso sobre su piano para verla todos los días mientras toca.
TN: Jamás pensé que tanta gente pudiera tener una conexión personal con las fotografías (eso suele pasar mucho con la música, pero yo no sabía que pasaba también con la foto) y que pase con las mías, y que además me lo cuenten, me ha revolucionado la vida.
G: What has been your most impactful experience as a photographer?
T: I think it would have to be this moment that I’m living now in which I went from leading a very private life to having a public life. Let things be written about me and, above all, let dozens of strangers write to me to tell me things. Every day I get messages from people who tell me the things they feel with my photos, Japanese-Mexican people who are represented in them and who say they had never felt that before or people who teach me that they put a photo of me as wallpaper or as a Facebook cover. Just yesterday I got a picture of a girl who downloaded a picture of me from the internet, printed it and put it on her piano to see it every day while she plays. I never thought that so many people could have a personal connection with photographs (that usually happens a lot with music, but I did not know that it also happens with the photo) and that it happens with mine, and that they also tell me, has revolutionized my life.
G: ¿Por qué piensas que el poverty porn es algo que no cuenta realmente algo?
TN: Me parece que es una forma de amarillismo. Visualmente los ambientes de la pobreza pueden ser muy impactantes, pero esas fotos que recurren más al impacto visual inmediato suelen no ofrecer nada de contexto, entonces no ayudan a comprender. No transmiten información, es solo eso, porno visual.
G: Why do you think poverty porn is something that doesn’t really count for something?
T: It seems to me that it is a form of yellowing. Visually the environments of poverty can be very shocking, but those photos that resort more to the immediate visual impact usually do not offer anything context, so they do not help to understand. They do not transmit information, it’s just that, visual porn.
G: ¿Hay un concepto antes de cada foto o el tema llega al hacer la primera captura?
TN: Sí y no. Es decir, no siempre. Hay veces que sé la foto que quiero tomar y voy y la tomo. Las fotos mías que aparecen en la expo Nippon América 日本アメリカ son justamente una serie sobre Tokio en la que trato de recrear escenas que recuerdo de cuando visitaba la ciudad de niña. Como en esa expo somos tres fotógrafos, siempre se hacen tres carteles, uno en el estilo de cada uno de nosotros. Mi cartel para la expo en México es un buen ejemplo de una escena que tenía en la cabeza y fui a tomarla sabiendo exactamente lo que quería:
G: Is there a concept before each photo or does the theme arrive when you make the first capture?
T: Yes and no. That is, not always. Sometimes I know the photo I want to take and I go and take it. The photos of me that appear at the expo Nippon America 日本アメリ.are precisely a series about Tokyo in which I try to recreate scenes that I remember when I visited the city as a child. As in that expo we are three photographers, we always make three posters, one in the style of each of us. My poster for the expo in Mexico is a good example of a scene I had in my head and I went to take it knowing exactly what I wanted:
G: En muchas otras ocasiones dices que lugares como Japón o México no se pueden contar con una sola imagen, ¿podrías explicarnos más al respecto?
TN: Creo que la mejor metáfora para explicar esto es la Ciudad de México. Tú y yo conocemos la ciudad que existe hoy en el valle de México, pero, al mismo tiempo, esa ciudad nunca deja de ser Tenochtitlán. La calzada de Tlalpan, la avenida México-Tacuba, avenida Chapultepec están trazadas sobre las viejas calzadas de Tenochtitlan. Secaron el lago, pero cada temporada de lluvias la ciudad se inunda y la naturaleza lacustre de la cuenca trata de retomar el espacio. Si explicáramos urbanísticamente la ciudad de México sin mencionar a Tenochtitlan, la explicación quedaría coja. Eso mismo se aplica a muchos aspectos de la vida en países como México y Japón.
TN: La realidad sucede simultáneamente en varias capas y, en mi opinión, por eso no se puede contar en una sola imagen. Ya sea visual o narrativa.
G: On many other occasions you say that places like Japan or Mexico can not count on a single image, could you explain more about it?
T: I think the best metaphor to explain this is Mexico City. You and I know the city that exists today in the Valley of Mexico, but, at the same time, that city never ceases to be Tenochtitlan. The calzada de Tlalpan, avenida México-Tacuba, avenida Chapultepec are traced on the old roads of Tenochtitlan. They dried up the lake, but every rainy season the city is flooded and the lake nature of the basin tries to retake the space. If we explained urbanistically Mexico City without mentioning Tenochtitlan, the explanation would be lame. The same applies to many aspects of life in countries such as Mexico and Japan. Reality happens simultaneously in several layers and, in my opinion, that is why it can not be counted in one picture. Whether visual or narrative.
G: ¿Tus fotos son una especie de viaje cultural entre lo nipón y lo mexicano, o son solo superposiciones temporales?
TN: Hay series que son una exploración de la binacionalidad. La que hace eso más claramente se llama OM, por el prefijo nahua que se usa para las cosas que tienen una naturaleza dual (de ahí vienen nombres como Ometéotl y Omecíhuatl, los señores de la dualidad).
TN: Otra de esas series que hacen el cruce entre México y Japón se llama
サ和ロ (saWAro). Ese es un juego de palabras que usa la palabra saguaro resaltando la partícula japonesa WA, que significa armonía. Pero armonía en un sentido social, esa armonía que le da a la cultura japonesa esa conciencia colectiva antes que individual, es decir, es la armonía de un grupo de gente que asume que tienen que operar colectivamente para sobrevivir como sociedad. En mi opinión, se puede hacer un paralelismo entre una sociedad así y lo que pasa entre las plantas en el desierto, porque en ese ambiente de recursos limitados es más fácil notar el equilibrio en el que viven todos los que comparten ese hábitat. Entonces esa serie mezcla imágenes de Japón con imágenes desérticas de México.
G: Are your photos a kind of cultural journey between the Japanese and the Mexican, or are they just temporary overlays?
T: There are series that are an exploration of binationality. The one that does that most clearly is called OM, for the nahua prefix used for things that have a dual nature (hence names like Ometéotl and Omecíhuatl, the Lords of duality).
Another of those series that make the crossing between Mexico and Japan is called サ和ロ (sawaro). That’s a pun that uses the word saguaro highlighting the Japanese particle WA, which means harmony. But harmony in a social sense, that harmony that gives Japanese culture that collective consciousness rather than individual, that is, it is the harmony of a group of people who assume that they have to operate collectively to survive as a society. In my opinion, a parallel can be drawn between such a society and what happens between plants in the desert, because in this environment of limited resources it is easier to notice the balance in which all those who share that habitat live. So that series mixes images of Japan with Desert images of Mexico.
G: ¿En qué consideras que se parecen y se diferencian ambas culturas a través de tus ojos?
TN: Hay un concepto en Japón, kuuki o yomu, 場の空気を読む, que básicamente se trata de entender las cosas sin que te las tengan que decir explícitamente. Mucha de la cultura japonesa es así, de sobreentendidos, y eso pasa también muchísimo en México, hay esa cultura de lo que ve se no se pregunta que desquicia a la gente de culturas más cartesianas. Y yo siento que hay muchas cosas en las que Japón y México se parecen mucho, pero sin duda una diferencia irrefutable es el nivel de violencia que implica la vida en México. No solo la violencia del crimen organizado que ahorita es una catástrofe, sino la violencia cotidiana en todas las relaciones. Creo que la película Museo de Alonso Ruizpalacios retrata muy bien esa violencia que es anterior a esta violencia desatada. Los sucesos de esa película pasan en los 80 y ahí todas relaciones, entre hermanos, entre amigos, entre padres e hijos, entre personas que hacen negocios, están mediadas por la violencia.
G: How do you think the two cultures look and differ through your eyes?T: There is a concept in Japan, kuuki or yomu , 場の空気を読む, which is basically about understanding things without you having to say them explicitly. A lot of Japanese culture is like that, of misunderstandings, and that also happens a lot in Mexico, there is that culture of” what you see is not asked » that unnerves people from more Cartesian cultures.
And I feel that there are many things in which Japan and Mexico are very similar, but certainly one irrefutable difference is the level of violence that life in Mexico involves. Not only is the violence of organized crime now a catastrophe, but everyday violence in all relationships. I think Alonso Ruizpalacio’s film Museo portrays very well that violence that predates this unleashed violence. The events of that film take place in the 80s and there all relationships, between brothers, between friends, between parents and children, between people who do business, are mediated by violence.
G: ¿Canción favorita?
TN: Dois Mil e Um de Os Mutantes y Tom Zé. Y no es una canción canción, pero el Concierto para Bongó de Pérez Prado me parece una genialidad.
G: Si pudieras convertirte en animal, ¿qué serías?
TN: Un conejo.
G: ¿De qué color son tus calcetines?
TN: Azules. Azul marino.
G: Favorite song?
T: Dois Mil e Um by Os Mutantes y Tom Zé. And it is not a song, but the concert for Bongó by Pérez Prado seems to me a genius.
G: What animal would you be if you could be anyone?
T: A Rabbit.
G: What color are your socks?
T: Blue. Navy blue.
G: What sound makes you feel good every time you hear it?
T: That’s a good question. First I thought it would have to be something related to food, but I couldn’t think of any and then I thought that the sound of the leona, the acoustic bass they use in the son jarocho, seems to me the most pleasant musical instrument I’ve heard. It’s a shame that they never make pure leona records, but I have friends who play son jarocho and that’s why I had to hear the leona without the rest of the instruments and I like it very much.
G: ¿Qué sonido te pone de buenas cada que lo escuchas?
TN: Qué buena pregunta. Primero pensé que tendría que ser algo relacionado con la comida, pero no pude pensar en ninguno y luego pensé que el sonido de la leona, el bajo acústico que usan en el son jarocho, me parece el instrumento musical más agradable que he oído. Es una pena que nunca hagan discos de pura leona, pero tengo amigos que tocan son jarocho y por eso me ha tocado oír la leona sin el resto de los instrumentos y me gusta muchísimo.
No sé para que publico, de todas formas no ves mis indirectas.