Ojalá hayas encontrado lo que fuera que buscabas. Extraño a tu perrito. Dile a tu sobrino que si regresé a jugar fútbol. Empecé a escribir más, me animé a probar tu sushi favorito y sí está bien culero, pero le agarré el gusto al gin y ahora preparo unos bien chingones. Ya no voy «muy acá» en la calle, perdí la pena a cantar en público y a veces hasta me aplauden.
Trato de sonreír más. No he podido dejar la carne. Ya no apuesto en línea.
Hice más amigos y amigas, y todos siempre me preguntan indirectamente por ti.
Me grabé tu cumpleaños y el vestido que traías el día que nos conocimos. La forma que tenías de apretarte la nariz con el dedo cuando ya estabas borracha y lo rojos que se te ponían los cachetitos cuando caminábamos bajo el sol.
Sigo haciendo listas para todo y no se me ha quitado lo pendejo.
No sé para que publico, de todas formas no ves mis indirectas.