Querer entender en dónde estamos
nos lleva a los dioses
a las vírgenes
a una gran e-x p-l-o-s-i-ó-n.
Al huevo cósmico.
A terapia.
Al anexo.
A ninguna parte.
Y sabiendo mucho
y sabiendo nada
E S T A M O S
Aquí esssstamos.
Y cada día
elegimos cómo estar
y nos lanzamos misiles
nos declaramos la guerra
a veces a nosotros mismos
una y otra vez
para alcanzar
dos, ocho, veinte
tierras prometidas.
¿Cuál es tu tierra prometida?
¿Por qué la quieres tanto?
¿Por qué es mejor que la mía?
Para sentir que algo se gana
algo que ni siquiera es nuestro.
¿Y qué es nuestro?
Si no es esto de estar
aquí
sabiendo todo
y sabiendo nada.
El aire cuando da en la cara.
es nuestro (?)
Ir al parque con tu perro,
escuchar a un bebé decir «mamá»,
encerrarte un día entero con alguien
en calzones
y poner el disco de Nick Cave.
Meterte cocaína.
Tomar jugo verde todas las mañanas.
Bailar con el cuerpo suelto
frente a tu espejo
cuando nadie te ve.
Todo eso es nuestro (?)
Detenerte en medio de la calle
a ver la Luna
que desde ahí
donde estás
se ve enorme
amarilla
dorada.
La mirada
¿es nuestra?
Hiciste una canción
un poema
una película
una sopa
Eres famoso.
Eres rico.
Eres pobre.
Eres nadie.
Eres todo.
Eso es tuyo (?)
Querer entender en dónde estamos
solo es posible
tal vez
cuando creamos
algo.
Porque sí
Todos tenemos
un misil en la mano.
No sé para que publico, de todas formas no ves mis indirectas.