New York City Department of Transportation. 'Car free NYC: Earth Day-Herald Square'. 2020. Fuente: Flickr.

El diseño de las ciudades y espacios públicos a lo largo del tiempo ha sido enfocado en lo estético, perdiendo así su razón de ser. Ya lo decía Jorge Draxl: «el espacio público moderno que se inicia en el siglo pasado entra a ser reconocido como una necesidad para ordenar y mejorar la ciudad. Los parques actuales no “adornan” la ciudad, sino la hacen viva» (El espacio público y su importancia social, 2017).

El diseño de un espacio público en muchas ocasiones ha sentenciado su propia muerte. La definición de «muerto» o «inerte» yace en la nulidad o carencia de vitalidad; ese mismo concepto se aplica en las ciudades. En referencia a los espacios públicos «muertos», estos carecen de visitantes, peatones, usuarios, ciudadanos. Son los espacios los que bajo sus cualidades formales y funcionales brindan el estímulo necesario para persuadir a los peatones a transitar por ellos. El rol participativo de estos es de suma importancia, sobre todo bajo el enfoque de seguridad. En los espacios públicos, son los mismos usuarios quienes brindan seguridad de manera inconsciente, a través de su única presencia, colectiva o individual. Los usuarios juegan un rol importante y se convierten en vigilantes naturales, capaces de persuadir hechos delictivos sin la necesidad de contacto físico e intercambio verbal.

Otro de los recursos que contribuyen a la seguridad en espacios públicos, bajo el concepto de vigilancia natural, es el uso de cerramientos transparentes, los cuales posibilitan el contacto visual entre el exterior e interior. Ver y ser visto.

Sin embargo, los recursos que sean brindados en estos espacios de intercambio social deberán ser equipados. Estos lugares procurarán brindar los mismos beneficios, según el rango de edades y las necesidades de estos. Para ello, se deberá realizar un estudio en donde se detalle la condición, necesidad y edad del usuario. Buscando así procurar que el equipamiento urbano satisfaga los requerimientos del usuario y estimular su estancia. Además, se deberá evitar sectorizar el equipamiento, pues lo que se busca es la interrelación entre ellos. Como en la imagen, por ejemplo.

Los enfoques y conceptos en cuanto a espacio público en muchas ocasiones han sido erróneos. Sin embargo, en los últimos años se ha prestado mayor atención a lo que verdaderamente se necesita para un desarrollo óptimo de estos. La sola presencia de usuarios garantiza seguridad mientras que el correcto equipamiento urbano, una adecuada proporción y distribución de áreas y el desarrollo de actividades para todo tipo de edades garantiza algo más que seguridad; es un vínculo creado a partir de lo que puede ofrecer el espacio al usuario, reforzando el sentido de pertenencia con su entorno.

No sé para que publico, de todas formas no ves mis indirectas.

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